Nuestro post de hoy en Conil Apartamentos lleva un número por nombre, 17. Y es que desde Alcalá del Valle hasta Zahara de la Sierra son 17 los municipios que componen la llamada ruta de los Pueblos Blancos.
Como un bloque de pisos en el que cada vecino posee su propia historia, la comarca de la Sierra de Cádiz cuenta con 17 leyendas por descubrir, así desde nuestra ventana de Conil de la Frontera viajamos hasta la Andalucía del siglo XV mientras paseamos por las calles de Alcalá del Valle y donde podremos descubrir un yacimiento megalítico fechado en el 2.000 a.C.
Seguimos nuestro camino y en el nº2 nos reciben los caballeros del Castillo de Tempul en Algar y los antiguos molinos de mano para moler el trigo del yacimiento del Cerro de la Botinera en Algodonales. Subimos unos escalones más hasta alcanzar a ver las ruinas romanas de Calduba, en Arcos de la Frontera, atravesamos la calzada romana de Benaocaz y dejamos a nuestra derecha el barrio nazarí para hacer una parada en el Festival del Lago de Bornos. Tras un breve descanso retomamos la marcha a pie por el sendero del Río Majaceite en el Bosque para reponer fuerzas con una buena ‘sopa pegá’ en el Gastor.
Entre montañas y sobre orígenes árabes se levanta el pueblo de Grazalema. En la frontera de Sevilla y Málaga y remontándonos al tiempo de los celtas, nos abre la puerta de esta ruta de los pueblos blancos los vecinos de Olvera.
Aún nos quedan horas de luz antes de regresar a nuestra costa de Conil para subir hasta Prado del Rey y para admirar las curiosas casas abrigadas bajo las rocas de Setenil de las Bogedas. Va atardeciendo y es un buen momento para disfrutar de las vistas de Torre Alháquime o para beber un trago de agua en la fuente de los nueve caños de Ubrique.
Sin darnos cuenta se va acabando el día, no antes sin degustar un queso payoyo de Villaluenga del Rosario y visitar uno de los monumentos nacionales de Cádiz como es el Castillo de Matrera en Villamartín. En la Villa Medieval de Zahara de la Sierra se hace de noche y nos dejamos embaucar por el embrujo de la luna reflejada en el blanco de las fachadas de estos 17 rincones, de estas 17 casas y esos 17 tesoros andaluces por descubrir durante las vacaciones.